El viceministro de Régimen Interior, Javier Issa, informó este miércoles que el Gobierno no acudirá a ninguna negociación con pobladores de K’ara K’ara, que bloquean hace 11 días el ingreso al relleno sanitario, si persiste en demandar el fin de la cuarentena, elecciones o la renuncia de la presidenta Jeanine Áñez.


“Nosotros no vamos a dialogar, no vamos a ir a una mesa de diálogo en el que los puntos sean, por ejemplo, que se levante la cuarentena, para que ellos vayan a trabajar, que existan elecciones en 60 días, como están pidiendo, o que renuncie la Presidenta”, afirmó Issa.

Por su parte, la gobernadora de Cochabamba, Esther Soria, mediante cartas de invitación, convocó a los movilizados, organizaciones vecinales, al Defensor del Pueblo, a las iglesias Católica y evangélicas, al Servicio Departamental de Salud, al comandante de la Policía en la capital del valle, al Alcalde de Cochabamba y al Ministro de Trabajo, delegado presidencial para el departamento por parte del Gobierno, a establecer una mesa de diálogo desde las 15.00.

Pobladores de varios barrios ubicados en inmediaciones de K’ara k’ara, al sur de la ciudad, bloquean todos los accesos al botadero y vías que conectan a la capital del con municipios del Valle Alto en demanda de al menos 14 puntos, entre ellos la distribución gratuita de agua, la entrega de canastas solidarias a todos los vecinos del sur, la instalación de banca móvil en los barrios, el diferimiento de deudas bancarias a seis meses de culminar la cuarentena, la suspensión de la cuarentena, elecciones generales y la renuncia de la presidenta Jeanine Añez y el ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

Dato

La medida adoptada hace 11 días dejó la ciudad inundada de basura, que no permite que el personal de salud ingrese a hospitales de la zona, tampoco a la Policía ni Fuerzas Armadas. En los últimos días los pobladores agredieron a dirigentes y vecinos que no participan de los bloqueos y los denunciaron por cobrar dinero a quienes quieren atravesar la zona.

El jueves, tanto Soria como el alcalde José María Leyes atendieron las demandas que son de su competencia, pero el diálogo instalado se rompió tras 10 horas de negociación al incrementarse los pedidos de los movilizados, que también exigieron la presencia de los ministros de Gobierno, Arturo Murillo y de la Presidencia, Yerko Nuñez.

Los movilizados desconocieron a sus dirigentes; no existe portavoz oficial, y ante la crisis sanitaria generada por la acumulación de desechos, al menos 6.000 toneladas en calles, viviendas y hospitales, Soria volvió a convocar al diálogo, esta vez comprometiendo la participación de autoridades nacionales como el delegado presidencia para Cochabamba, el ministro de Trabajo, Óscar Mercado.