Las altas temperaturas registradas este verano en Mexicali, Baja California, ocasionaron la muerte de un niño de tres años de edad mientras estaba dentro de un vehículo, reportaron autoridades este martes.
El menor Eduardo “N” falleció el pasado 23 de agosto pasado luego de estar dentro del auto mientras el ambiente registraba las horas más calientes del día, de acuerdo con el Servicio Médico Forense de la entidad.
La ciudad de Mexicali ha registrado temperaturas superiores a los 45 grados centígrados en los últimos días.
Tras realizar exámenes al cuerpo del menor, se concluyó que no había huellas de violencia propias del síndrome de niño maltratado.
“Continuando la necropsia, presentaba todos los datos característicos de un golpe de calor, se interrogó a la familia, a lo que tuvimos conocimiento con el MP, fue poco, que se encontró en un vehículo y de ahí lo trasladaron a recibir atención médica a Arce Quiñones, donde lo declararon sin vida”, mencionó.
El cuerpo del menor fue entregado a sus familiares el pasado lunes 24 de agosto.
El golpe de calor es el aumento de la temperatura del cuerpo por una exposición prolongada al sol o por hacer ejercicios en ambientes calurosos o con poca ventilación, al punto de que el cuerpo pierde agua y sales esenciales para su buen funcionamiento.
La exposición a las altas temperaturas que provocan este padecimiento va de 1 a seis horas.
El golpe de calor es considerado una urgencia médica porque puede ocasionar la muerte en menos de 24 horas si no se recibe atención inmediata.
Los niños y los adultos mayores son los más afectados por este tipo de padecimientos.
La semana pasada se acumularon 8 muertes por golpe de calor en la ciudad de Mexicali durante lo que va del verano, de acuerdo con reportes locales.
A ello se suman 93 fallecidos por enfermedades agravadas por las altas temperaturas, la mayoría de ellas ligadas a padecimientos cardíacos.
Cómo tratarlo
La clave está en poder reconocer la necesidad de mantenerse hidratado. Las personas mayores, por la edad, se vuelven menos sensibles a sentir sed, por lo que deben recordar y tener como hábito tomar agua. Cuando la temperatura sube y comienzan los síntomas, el cuerpo puede haber perdido entre 4 y 6 litros, que se deben reponer de forma constante.
El golpe de calor también se da usualmente mientras las personas jóvenes hacen entrenamiento físico, debido a la pérdida de agua. Para estos casos se recomienda hacer actividad física por la mañana temprano o por la tarde, luego de la caída del sol.
Teniendo en cuenta que la mayoría de las plazas son de cemento, conviene buscar lugares que sean frescos, donde corra brisa o viento. El entrenamiento debe incrementarse en forma progresiva: primero se aumenta la frecuencia semanal, luego el volumen y finalmente, la intensidad.