La afrenta por dos casos al ministro de Gobierno, Arturo Murillo, le costó el cargo al procurador general del Estado, José María Cabrera, a quien una comisión del Ministerio de la Presidencia le comunicó que fue destituido este viernes a través de un decreto presidencial.


Desde la cuenta oficial de Twitter, la Procuraduría General del Estado publicó una serie de tuits para alertar de las irregularidades. “#URGENTE SIN JURAMENTO NI POSESIÓN DE LEY SE QUISO TOMAR LA PROCURADURÍA GENERAL DE ESTADO”, publicó.

En el texto de la red social, la entidad adjuntó un video en el que se muestra la intervención de la oficina por parte del personal del Gobierno. Un funcionario de este despacho comunica a Cabrera que le está trayendo una copia legalizada de un decreto presidencial de destitución.

“Me permito en entregarle, es un decreto presidencial debidamente legalizado cuyo artículo único señala que se designa al ciudadano Alberto Javier Morales Vargas, el doctor que nos acompaña, como procurador general del Estado y en su parágrafo segundo se abroga el Decreto Presidencial 4092, del 3 de diciembre de 2019”, dice.

Cabrera revisa el documento y lee el Decreto Presidencial 4345: “Designar a Alberto Morales Vargas como procurador general del Estado, quien tomará posesión del cargo con las formalidades de rigor, previo cumplimiento de lo establecido por ley”.

“Mi estimado doctor Javier Ferrufino, respetuoso de la Constitución de las leyes, y en mi condición  de procurador general del Estado en ejercicio, respetamos este Decreto Presidencial 2345, pero, con carácter previo hacer la transmisión del mando en la Procuraduría, que se cumpla con lo que dice el mismo decreto a quien tomará el mando con las formalidades de rigor”, dice Cabrera.

El destituido funcionario recuerda al personal del Ministerio de la Presidencia que sus antecesores, Hugo Montero Lara, Héctor Arce Zaconeta y Pablo Menacho, y él han tomado posesión del cargo con las formalidades legales. Voy a entregar el cargo de forma inmediata, “pero demando de que dicha demanda transmisión del mando se realice cumpliendo la Constitución y las leyes”, reclamó.

Exigió que la presidenta Jeanine Áñez tome posesión a Morales Vargas. “Luego, con alfombra roja recibiremos al procurador designado por la Presidenta. Mientras tanto, no puede producirse la transmisión del mando”.

Ferrufino responde que entiende la preocupación de Cabrera y dice que se dirigirá al Palacio Quemado para comunicar la posición al ministro de la Presidencia, Yerko Núñez. “Seguramente, el Ministerio de la Presidencia se comunicará con usted; yo no tengo rango de ministro”, respondió.

Enseguida, Cabrera replica: “Hay situaciones que atentan al sistema democrático, a la transparencia, porque la remoción del Procurador General del Estado se da a petición del ministro de Gobierno, Arturo Murillo, por la afectación en el cumplimiento de mis funciones del caso ENDE, que está propugnando una privatización de una empresa nacional estratégica, y del caso Gases Lacrimógenos, que son cuatros meses que no ha rendido la información requerida por la Procuraduría”.

“Esas son las causas que ameritaron la remoción que ahora veo que ha concretado la Presidenta a petición del ministro Murillo”, insistió Cabrera.

En las últimas horas, el Procurador denunció que Murillo impulsa la privatización de ENDE, la empresa estatal de energía eléctrica, a través de la devolución de acciones de Elfec en Cochabamba cuyo decreto aún no fue firmado debido a la objeción de algunos ministros.

Además, Cabrera cuestionó a Murillo que no haya respondido requerimientos de información por la presunta compra irregular de equipo antidisturbios, en diciembre del año pasado, que investiga la Asamblea Legislativa.

Desde la cuenta de Twitter de la Procuraduría,  Cabrera denunció que se opone a la devolución de las acciones nacionalizadas de Elfec, “porque afecta intereses del Estado”, que “el ministro Arturo Murillo advierte con su destitución”.