Un paro cívico contundente se desarrolla este viernes en el radio urbano de Santa Cruz de la Sierra, pero la medida no logró frenar la transmisión de mando presidencial del domingo, tal como pretenden los cívicos que lo convocaron.
El presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, dijo que se esperaba que con la presión ciudadana en las calles, la administración saliente de Jeanine Áñez cierre el paso a la posesión de Luis Arce como presidente y David Choquehuanca, como vicepresidente.
Indicó que Áñez deja un país “conflictivo y convulsionado” y que una de las acciones más importantes, en su penúltimo día de mandato, “no la ha hecho”.
«Lamentablemente las acciones más importantes que tenía que haberlas dado nuestra presidenta, como parar el cambio de mando, no lo ha hecho. Entonces está dejando un país convulsionado», dijo el cívico.
Los cívicos de Santa Cruz y opositores al Movimiento Al Socialismo (MAS) en otras regiones del país cuestionan el resultado de las elecciones pasadas, en la que ganó Arce con el 55.1% de los votos, y exigen una auditoria al proceso a pesar que fue validado por actores políticos y las misiones de observación internacional.
En la jornada de movilizaciones, la fuerza pública intervino en el Plan Tres Mil, ante un amago de enfrentamiento entre ciudadanos que apoyan la victoria de Arce y quienes sospechan de “fraude” en las elecciones, aunque sin presentar pruebas.
En zonas alejadas de la ciudad, las tiendas, pequeños mercados de abasto y talleres funcionan con normalidad. El paro ya fue acatado desde ayer por municipios rurales cruceños.