El siniestro se desató alrededor de las 11:00 a.m. en una zona cercana al aeropuerto internacional Viru Viru y rápidamente comenzó a propagarse, impulsado por las condiciones climáticas y el viento desfavorable. El fuego, que consumió más de 40 hectáreas de vegetación, llegó a amenazar un condominio ubicado en la parte posterior del aeropuerto, generando preocupación entre los residentes y las autoridades locales.

El trabajo arduo y coordinado de los bomberos y los equipos de emergencia fue fundamental para contener la expansión del incendio. «En el sector norte, el fuego amenazaba las casas de cinco familias, y las pudimos evacuar con éxito. Gracias a la rápida respuesta y el esfuerzo conjunto, logramos controlar el fuego», informó Manfredo Borda, el secretario de Seguridad Ciudadana.

A pesar de los desafíos presentados por las condiciones climáticas, los equipos de rescate lograron establecer un perímetro de control para evitar que las llamas ingresaran al condominio y a otras áreas densamente pobladas. «El viento no nos ayuda, pero estamos implementando estrategias para contrarrestarlo, incluyendo la creación de líneas de fuego para evitar que se propague hacia zonas habitadas», explicó Borda.

Afortunadamente, no se han reportado heridos ni pérdidas materiales como resultado del incendio. Sin embargo, la magnitud de la destrucción ambiental es evidente, ya que más de 40 hectáreas de terreno han sido consumidas por las llamas, generando preocupación sobre el impacto en la biodiversidad local y el ecosistema.

Las autoridades continúan monitoreando la situación y han exhortado a los residentes a permanecer alerta y seguir las instrucciones de seguridad proporcionadas por los equipos de emergencia. La rápida respuesta y la dedicación de los bomberos y equipos de rescate han sido fundamentales para evitar una catástrofe mayor y salvaguardar la vida y las propiedades de los habitantes de la zona.

El incidente resalta la importancia de la prevención de incendios y la necesidad de mantener una vigilancia constante en áreas propensas a siniestros similares. Las autoridades locales están evaluando medidas adicionales para reducir el riesgo de futuros incendios y garantizar la seguridad de la comunidad.