Sin mencionar a Chile y en un giro en la línea dura sobre el mar, la presidenta Jeanine Áñez instó en la Asamblea de la Organización de Naciones Unidas (ONU) a una solución, “vía la negociación y el entendimiento fraternal”, de la “carencia de Bolivia a un acceso soberano al Océano Pacífico”.
Dijo que en ese escenario internacional “no puede dejar de mencionar el tema marítimo”, aunque tuvo una marcada diferencia sobre las características de las alocuciones que hacía el expresidente Evo Morales, quien hablaba de la demanda marítima y del derecho de volver al Pacífico.
Áñez, casi al final de su intervención, señaló: “Hago un llamado a la comunidad internacional para que en estos nuevos tiempos solucionemos por la vía de la negociación y el entendimiento fraternal los problemas críticos y pendientes entre los Estados como la carencia de Bolivia de un acceso soberano al océano Pacífico”.
Hace un año y en ese mismo foro, Morales insistió en que la falta de solución al conflicto es un tema pendiente en la región. “Es indispensable para la vida, para la integración y el desarrollo de los pueblos; por ello, Bolivia no renunciará a su derecho de acceder soberanamente al océano Pacífico”, afirmó en ese entonces.
Bolivia perdió, en el gobierno de Morales, en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) la demanda interpuesta contra Chile para que cumpla con sus compromisos de negociar una salida soberana al Pacífico, que arrebató tras la invasión de 1879.
“La decisión judicial no ha terminado la controversia. Al contrario, es explícita en reconocer que subsiste y en destacar que no cierra la posibilidad para que ambos Estados podamos encontrar una solución; por ello, la ONU debe vigilar y exigir el cumplimiento integral de las decisiones de la Corte, para que ambos pueblos sigamos negociando de buena fe para cerrar la heridas abiertas”, insistió.
Durante su intervención de este miércoles, Áñez no mencionó a Chile cuando habló del mar.