La movilización de pobladores de Buena Vista, en el departamento de Santa Cruz, se radicalizó este lunes, ingresando al octavo día de bloqueo de la carretera que une a ese departamento con Cochabamba.


Los manifestantes, que exigen la construcción de la carretera Buena Vista – Las Cruces – Santa Cruz, advirtieron con endurecer su protesta si las autoridades no responden a sus demandas.

“Si no nos dan una respuesta positiva, vamos a radicalizar nuestra medida de presión”, dijo a los medios el dirigente de los manifestantes, José Pérez.

Pérez explicó que los pobladores están preocupados por la posibilidad de que el proyecto de construcción de la carretera se vea afectado si se modifica el trazo de la ruta.

“La carretera debe pasar por Buena Vista, si no se respeta nuestro pedido, el proyecto podría perder el financiamiento”, agregó.

Los manifestantes también exigieron que las reuniones con la Gobernación de Santa Cruz y la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) se realicen en Buena Vista.

El bloqueo en Buena Vista ha causado importantes perjuicios económicos a los sectores productivos de la región.

La Cámara Nacional de Exportadores (CANE) ha reportado pérdidas de más de 50 millones de dólares debido a la interrupción del transporte de mercancías.

Otro sector afectado ha sido el de la provisión de combustibles. El ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, informó que el abastecimiento de combustible presenta algunas dificultades, pero que se están subsanando.

Las autoridades departamentales de Santa Cruz han expresado su disposición al diálogo con los manifestantes.

El gobernador, Luis Fernando Camacho, dijo que está dispuesto a recibir a los pobladores de Buena Vista para escuchar sus demandas.

“Estamos abiertos al diálogo, pero no vamos a ceder a las presiones”, afirmó Camacho.

La movilización en Buena Vista se suma a las protestas que se han registrado en otras regiones del país en los últimos meses.