Un nuevo estudio publicado en The Astrophysical Journal Letters ha revelado que el exoplaneta Gliese 367 b, también conocido como Tahay, podría estar compuesto casi en su totalidad de hierro.
Tahay es un planeta singular debido a su órbita excepcionalmente rápida, completando un giro alrededor de su estrella en tan solo 7,7 horas. Aunque existen otros planetas con órbitas veloces, lo que lo distingue es su densidad (casi el doble de la de la Tierra). Esto sugiere que estaría compuesto casi en su totalidad de hierro.
Los investigadores han formulado diversas teorías para tratar de explicar esto. Una apunta a que Tahay podría ser el núcleo remanente de un planeta más grande que perdió su capa externa, posiblemente similar a una Tierra desprovista de su manto rocoso debido a colisiones con otros cuerpos celestes.
Otra hipótesis plantea que Tahay se originó en una región rica en hierro (esta opción es la menos probable). Por último, se cree que Tahay fue en sus inicios un gigante gaseoso que se formó lejos de su estrella y luego se acercó demasiado, sufriendo la eliminación de su atmósfera debido a la intensa radiación estelar.
El sistema de Gliese 367 b presenta un enigma. Además de este exoplaneta, otros dos fueron detectados mediante el espectrógrafo HARPS, pero no por TESS. Estos hallazgos restringen las teorías sobre su formación, y aunque podría haber surgido en una región rica en hierro, no se descartan colisiones violentas entre planetas gigantes como factor determinante.
En resumen, se destacan tres teorías principales: la formación de Tahay en un entorno rico en hierro, la influencia de colisiones en la eliminación de sus capas exteriores, o su origen como el núcleo de un antiguo gigante gaseoso. Es posible que una combinación de estas teorías arroje luz sobre su configuración actual.
Aún con todo, no podemos negar que Tahay representa un desafío intrigante para los astrónomos y pone a prueba nuestras teorías existentes. Como concluyen los investigadores, este sistema se convierte en un objetivo valioso para una entender mejor los procesos de formación y evolución planetaria.