La sequía que afecta a Bolivia está retrasando la siembra de verano en el departamento de Santa Cruz, el principal productor de alimentos del país.


Según el calendario agrícola, a la fecha debería haber un avance del 20%, pero solamente se avanzó un 1%.

“Estamos atravesando por una situación de una crisis climática y falta de agua en regiones productores. El agricultor toma el riesgo de poder iniciar la siembra y vemos que la sequía tendrá como consecuencia que el área de siembra de los principales cultivos se pueda encarecer para nosotros los productores”, señaló el presidente del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Santa Cruz (Cinacruz), Mirko Mateff.

Mateff advirtió que si la situación persiste habrá un encarecimiento en alimentos estratégicos como la soya, el maíz y el arroz, ya que la sequía implica una merma de la producción.

La campaña debió comenzar en octubre y los productores alertan menor oferta de granos debido a esta situación. A esto se suma las fallas en el abastecimiento de diésel, lo que dará lugar a que repercuta también en el precio final de la carne de pollo y de res.

“Estamos viendo que la sequía está afectando a la producción de soya, que es el principal cultivo de exportación del país. Si no hay lluvias en los próximos días, vamos a tener una baja producción de soya y eso va a impactar en el precio de la carne”, señaló el presidente de la Asociación de Ganaderos de Santa Cruz, Oscar Cerruto.

La sequía también está afectando a otros cultivos como el maíz, el arroz y el trigo. Estos cultivos son importantes para la seguridad alimentaria del país.

Las autoridades del Gobierno nacional anunciaron que están trabajando para mitigar el impacto de la sequía. Sin embargo, los productores advierten que las medidas tomadas hasta el momento no son suficientes.