Después de cometer el brutal crimen, el joven de 21 años llamó a la policía para confesar.


Elvia Espinoza, una maestra de 46 años, fue asesinada a puñaladas el pasado sábado 6 de abril en Frostproof, un condado a unas dos horas de Orlando, Florida. La muerte de la mujer, para sorpresa de las autoridades, fue a manos de su hijo Emmanuel Espinoza, un estudiante de cuarto año de medicina.

Según la información, el joven de 21 años condujo hasta la casa de su madre, ubicada en una zona boscosa de la ciudad, para acudir a un evento familiar en honor a su abuelo.

Sin embargo, este llegó un día antes y cuando su madre abrió la puerta de su casa para darle la bienvenida, la apuñaló en el estómago y pecho en más de 70 ocasiones.

Después de este brutal crimen, Espinoza, quien es acusado de asesinato en primer grado, marcó al 911 para confesar que había asesinado a puñaladas a su madre.

Espinoza indicó que escogió apuñalarla en el pecho y estómago porque sabía que «logró el máximo efecto».

De igual manera, cuando se le consultó porque lo hizo, supuestamente dijo que amaba a su madre; sin embargo, varias veces pensaba en matarla debido a que lo irritaba.